¿Cómo abren las puertas los cerrajeros?: trucos y métodos

¿Cómo abren las puertas los cerrajeros?: muchas personas se preguntan cómo abren las puertas los cerrajeros para hacerlos ellos en caso de dejarse las llaves dentro de casa o haberlas perdido. El caso es que solamente los cerrajeros profesionales como los que puedes encontrar en nuestro portal de Mansio, cuentan con las herramientas y los conocimientos necesarios para abrir cualquier tipo de puerta.

Hay que tener en cuenta que cada tipo de cerradura posee su propio mecanismo y únicamente los profesionales del sector conocen todas las técnicas que se precisan para abrirlas con facilidad y sin forzarlas. De hecho, si se usan mal las técnicas, se podría terminar dañando el mecanismo. Sin embargo, ellos son expertos en realizar aperturas tanto en bombines comunes como en puertas atascadas, de seguridad, candados, etc.

¿Cómo abren las puertas los cerrajeros?: métodos más usados por los cerrajeros para abrir puertas

Los cerrajeros siempre intentan usar métodos no invasivos y no colaterales a la hora de abrir cerraduras. Generalmente, mediante el bumping y el impresioning, que son las técnicas más prácticas para aquellos casos en los que no estamos ante un bombín simple o en casos en los que alguien se ha quedado inconsciente en el interior de la vivienda y hay que actuar con rapidez. Pero lo cierto es que hay otros mecanismos para acceder a la vivienda y que dependen mucho del tipo de cerradura.

• Bumping: se utiliza sobre todo en las puertas que cuentan con cerraduras de bloqueo dentado. Consiste en usar una llave especial para desbloquear la cerradura. Se introduce en su interior y se da un golpe seco. Los dientes se ajustan para alinear el sistema de apertura, permitiendo que la llave gire y que podamos abrir la puerta. La mayor ventaja de esta técnica es que nos permitirá seguir usando la llave original sin problema, pues la cerradura no experimenta ningún daño.
• Impresioning: este método consiste en colocar una lámina de aluminio en una llave especial que cuenta con una hendidura larga y uniforme. La llave se introduce en el bombín y se empieza a mover hacia la izquierda y la derecha, intentando hacer un duplicado de la llave in situ. Al mover la llave, vamos creando en la lámina de aluminio las hendiduras de la llave original. Una vez hecho el molde, la llave se gira y la cerradura se abre.
• Ganzúas: este era el método por excelencia antes de que llegara el bumping. No obstante, es necesario conocer perfectamente el tipo de cerradura con el que estamos trabajando para que funcione. Consiste en activar todos los resortes internos y girar mientras el bombillo se encuentra alineado. Por esta razón, podemos encontrar ganzúas con terminaciones, formas y grosores muy distintos, para ajustarse al tipo de cerradura que necesitamos abrir. Es por ello por lo que los cerrajeros las usan solamente cuando los sistemas sofisticados no resultan tan eficientes.
• Tarjeta especial: todos los cerrajeros cuentan con una tarjeta de plástico especial para abrir puertas. Este método únicamente funciona con bombines sencillos y siempre que no haya cerrojo en la parte de atrás. Metemos la tarjeta por la hendidura que hay entre el marco y la puerta. La inclinamos unos 90 grados con respecto al pestillo de la cerradura, bajamos la tarjeta hasta que haga contacto con el pestillo y entonces presionamos de forma constante hacia dentro. El truco está en empujar el pestillo con la tarjeta para liberar la puerta. La cuestión es que, aunque pueda parecer sencillo, no lo es en realidad, pero los cerrajeros profesionales pueden hacerlo en unos segundos sin ocasionar ningún daño.

¿Se puede abrir la puerta sin ayuda de un cerrajero?

Es probable que en alguna película hayas visto técnicas muy eficientes para abrir puertas fácilmente con ayuda de una tarjeta o una horquilla. Sin embargo, este tipo de técnicas no siempre son efectivas o tan rápidas como se muestra en el cine. Es más, hay algunos mecanismos de seguridad muy sofisticados que no permiten abrir la puerta con este tipo de trucos. Y en el caso de poder hacerlo, es posible que te lleve incluso varias horas, ya que no es tan sencillo. Incluso puedes terminar dañando algunas terminaciones.

Por eso, si decides abrir la cerradura por tu cuenta, puede que tengas que cambiar todo el sistema y terminarás gastando más dinero que el que te hubieras gastado llamando al cerrajero desde el primer momento.